sábado, 24 de enero de 2009

Las tres marías

Una vez, alguien que moderaba un grupo de correo internacional me dijo que, por Internet, si no querían tenerse polémicas, sobretodo entre gente de diferentes países, había tres temas que debían evitarse: el fútbol, la política y la religión.

Me parece que política nunca he hablado. No me interesa.

De religión había hablado alguna vez, cuando leía el libro de Chateaubriand: me trajo problemas. Una persona se sintió ofendida por mi escepticismo y me lo devolvió encontrándome todas las faltas de ortografía que había hecho, y haciéndomelas saber. No es que no me guste conocer las faltas de ortografía que hago, al contrario, me gusta ser consciente de ellas y corregirlas, pero como que también soy consciente que lo hago lo mejor que puedo en este sentido, que me las pasasen por la cara con evidente mala fe y como prueba de mi ignorancia y así rebatir lo que hubiese podido decir en contra de la religión (que tampoco era tan grave), no me gustó nada de nada, francamente.

De fútbol sí que he hablado, pero como lo hago de una manera que podría ser descrita como bastante cínica, sin la pasión del aficionado y del seguidor, ni desde la verdad absoluta de un solo equipo, sino que más bien me acerco al fútbol como fenómeno social, me imagino que es por eso que no me ha llevado problemas, y espero no tenerlos en el futuro, porqué de fútbol continuaré hablando.

Escribo eso porqué se me había ocurrido hacer un post hablando de la vida después de la muerte, ya que el otro día hablé del tema, y de mi descreimiento en este aspecto, pero se me ha ocurrido: ¿religión + Internet? Mala combinación. Lo que yo haría de buena fe como una exposición de mis creencias más íntimas, a alguien podría parecerle un ataque contra las suyas... No es que no crea en la libertad de expresión, pero la libertad de expresión tiene consecuencias, y sé que no estoy dispuesta a aceptar según qué consecuencias por hacerme pasar las ganas de decir lo que me apetezca...

Tendré que ir pensado en escribir sobre alguna otra cosa...

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